Comprender la conducta humana en el trabajo es un verdadero desafío. Tradicionalmente, las organizaciones tendían a concentrarse en lo observable: el rendimiento, las habilidades y las acciones que un empleado realiza en el ámbito laboral. Sin embargo, este enfoque puede ser limitante, ya que se queda solo en la superficie de un fenómeno mucho más amplio y profundo.

Para entender esto más claramente, usemos la analogía de un iceberg. Cuando vemos un iceberg desde la superficie del agua, solo vemos una pequeña fracción de su tamaño total. La mayor parte del iceberg se encuentra bajo la superficie, oculta a la vista. De la misma manera, la conducta humana en el trabajo tiene aspectos visibles y ocultos.

Los Aspectos Visibles: En la Superficie del Iceberg

Los aspectos visibles de la conducta humana en el trabajo son aquellos que podemos observar y medir con facilidad. Estos incluyen las habilidades técnicas y blandas de un empleado, sus resultados en términos de productividad y eficacia, y los comportamientos que manifiesta en el entorno laboral.

Estos aspectos son importantes, sin duda. Nos proporcionan una manera práctica de evaluar y comparar el desempeño de los empleados. Pero si nos limitamos a ellos, estamos ignorando una gran cantidad de información relevante.

Los Aspectos Ocultos: Debajo de la Superficie del Iceberg

Debajo de la superficie, encontramos los aspectos ocultos de la conducta humana en el trabajo. Estos son más difíciles de observar y medir, pero tienen un impacto profundo en cómo los empleados se desempeñan y se sienten en su trabajo.

Los aspectos ocultos incluyen emociones, miedos, dudas, valores y el propósito vital del individuo. Los valores y el propósito vital pueden ser especialmente importantes en el contexto laboral. Un empleado que encuentra un sentido de propósito en su trabajo y cuyos valores están en sintonía con los de la organización es probable que esté más comprometido y sea más productivo.

El Enfoque Holístico: Mirando Más Allá de la Superficie

En vista de lo anterior, se vuelve crucial adoptar un enfoque holístico para entender y manejar la conducta humana en el trabajo. Este enfoque implica considerar tanto los aspectos visibles como los ocultos y entender cómo interactúan entre sí.

Las organizaciones pueden hacer esto de varias maneras. En primer lugar, es esencial cultivar una cultura laboral fuerte y distintiva. La cultura organizacional define el carácter de una empresa, proporcionando una guía para las interacciones y decisiones cotidianas. Cuando se define, se respeta y se promueve adecuadamente, la cultura laboral puede servir como un potente motivador y unificador para los empleados.

Para que una cultura laboral sea efectiva, debe estar en sintonía con los valores corporativos de la empresa. Los valores corporativos son principios fundamentales que guían la forma en que una organización opera. 

Con una cultura y unos valores bien definidos, las empresas están en una mejor posición para atraer y retener talento. Los empleados que sienten que sus valores personales están alineados con los de la empresa tienden a estar más comprometidos, más satisfechos y, en última instancia, son más productivos.

Sin embargo, cultivar una cultura laboral y valores corporativos fuertes no es simplemente una cuestión de definirlos en un documento. Las organizaciones deben esforzarse por vivir estos valores en su trabajo diario y establecer políticas y prácticas que reflejen los valores de la empresa.

Otro factor crucial que influye en la conducta observable de un individuo en el lugar de trabajo es la comprensión de sus miedos y preocupaciones. Estos pueden ser de naturaleza tanto profesional como personal, e influyen significativamente en la forma en que un empleado se desempeña en su trabajo.

Las preocupaciones profesionales son variadas. Por ejemplo, un empleado puede sentir ansiedad por su progresión profesional, dudar de sus propias habilidades, temer no cumplir con las expectativas o estar inseguro acerca de la estabilidad de su empleo, sobre todo en momentos de incertidumbre económica.

Para abordar eficazmente estas preocupaciones profesionales, es esencial una comunicación abierta, transparente y sincera. Las organizaciones deben implementar mecanismos que permitan a los empleados expresar libremente estas inquietudes laborales. Es crucial que los empleados sientan que sus voces son escuchadas y comprendidas, y que sus preocupaciones serán abordadas de manera justa y considerada.

Por otro lado, las preocupaciones personales influyen considerablemente en el desempeño laboral de una persona. Estas inquietudes se extienden más allá del ámbito laboral y penetran en la vida privada del empleado, lo que puede provocar una serie de complicaciones en el trabajo.

Un empleado puede estar lidiando con problemas de salud física o emocional personales o de un ser querido. Estos problemas pueden consumir mucho tiempo y energía, dejando al empleado distraído y menos capaz de centrarse en sus responsabilidades laborales. 

Para abordar estos desafíos, las empresas pueden poner en marcha programas y políticas de salud y bienestar. Han de buscar soluciones que proporcionen a los empleados un espacio seguro y confidencial para hablar de sus problemas y buscar soluciones.

¿Qué hacemos en Niubo? 

Nuestra especialidad es ayudar a los empleados a enfrentar y superar desafíos personales, con especial énfasis en los desafíos familiares. Entendemos que la familia es uno de los aspectos más importantes y a la vez más complejos de la vida de una persona. Por ello, proporcionamos una solución digital innovadora que permite a las empresas acompañar de manera efectiva a sus empleados en estos desafíos.

Nuestro enfoque consiste en conectar a los empleados con una red de más de 50 profesionales expertos en diversas áreas de bienestar familiar. Entre ellos se encuentran psicólogos, comadronas, abogados, asesores, nutricionistas, fisioterapeutas y geriatras. Nuestro objetivo es ofrecer a los empleados el apoyo que necesitan, en un espacio seguro y confidencial, para lidiar con una variedad de cuestiones que pueden afectar su equilibrio entre la vida laboral y personal.

Creemos firmemente que tener acceso a profesionales expertos puede brindar a las familias la tranquilidad que necesitan para concentrarse en su bienestar integral. Esto, a su vez, favorece el rendimiento y la satisfacción tanto en el hogar como en el lugar de trabajo. 

Conclusión: 

Entendemos que descifrar la conducta humana en el lugar de trabajo es un desafío, pero también es una valiosa oportunidad. Al adoptar un enfoque holístico, las organizaciones pueden obtener una comprensión más profunda y completa de sus empleados.

Este enfoque holístico va más allá de la evaluación y mejora del rendimiento de los empleados. También incluye el apoyo a su bienestar integral y la satisfacción en el trabajo. Cuando los empleados se sienten valorados, comprendidos y respaldados, su compromiso y productividad se incrementan, lo que conduce a una mayor eficacia y éxito para toda la organización.