En la valoración completa del bebé tras el nacimiento, revisaremos:
- Cráneo y columna vertebral (posible presencia de deformidades, tortícolis, etc. Especialmente importante en embarazo múltiple, si viene de nalgas o si ha habido instrumentalización o fractura en clavícula).
- Sistema digestivo (existencia de reflujo, cólicos, disquecia o falso estreñimiento, asesoramiento para detectar síntomas en casa, etc.).
- Sistema nervioso (observación de la respuesta del bebé ante distintos movimientos, testeo de reflejos, tono de su musculatura, etc. Especialmente recomendable para bebés prematuros o partos complicados).
- Sistema musculoesquelético (valoración de las articulaciones y su funcionalidad, en especial caderas, clavículas, tobillos y pies).
- Sistema orofacial (valoración del agarre y la succión en pecho o biberón. Fundamental durante las primeras semanas, si hubiera dolor en la mamá o problemas de alimentación en el pequeño).
- Porteo: asesoramiento para la realización autónoma del porteo. Beneficios y fundamentos del mismo.
Esta primera valoración nos permitirá tener una visión amplia del recién nacido.